Joan Martí Molist – ¿A qué se enfrenta la vulcanología del futuro?
Joan Martí Molist, doctor en geología y profesor investigador del CSIC, presentó ¿A qué se enfrenta la vulcanología del futuro? el pasado viernes 20 de octubre en la Sala Magma del Espai Cràter. En el marco del XVII Los grandes interrogantes de la ciencia, ciclo de conferencias organizado por el SIGMA, el Espai Cràter y el Patronato de Estudios Históricos de Olot y Comarca, el vulcanólogo planteó una aproximación a esta ciencia, que fue desde su origen hasta sus perspectivas de futuro.
En primer lugar, enfatizó en la figura del vulcanólogo, científico encargado de vigilar e investigar todo lo que tiene que ver con los volcanes. Tal y como afirmó, la vulcanología es una disciplina que bebe de otras áreas de conocimiento, como la geología, la física y la geografía, porque no dispone de estudios propios. Por este motivo, gracias a las aportaciones de un amplio abanico de disciplinas, es posible estudiar en profundidad un fenómeno tan complejo como es la dinámica de las placas tectónicas en el conjunto del planeta.
Años atrás, la vulcanología era una ciencia descriptiva, basada en la observación, no obstante, Martí explicó que tanto la erupción de 1943 del volcán Parcutin, en México, como la del Saint Helens de 1980, en Estados Unidos, supusieron un punto de inflexión en su práctica. Más allá de una tarea explicativa, los vulcanólogos empezaron a indagar en los procesos para tejer predicciones de las erupciones que podían tener lugar en toda la superficie terrestre. Por este motivo, la vulcanología moderna está formada por dos líneas imprescindibles: la vigilancia y la interpretación.
Uno de los puntos clave de la charla fue la idea que la sociedad debería promover la adaptabilidad a los fenómenos naturales, velando por la conservación y la convivencia, tanto con los volcanes como con la naturaleza en general. El geólogo invitó al público a reflexionar que los volcanes ya existían antes de nuestra llegada y continuarán en la Tierra cuando ya no estemos, por eso, cabe cuidar nuestro entorno y procurar ralentizar el cambio climático. Como consejo, propuso una buena gestión del territorio y de los recursos, fomentar la investigación y desarrollar herramientas para las buenas prácticas. De esta manera, se podrá aprovechar lo que nos dan los volcanes: atmósfera, vida, materiales, suelos fértiles, patrimonio geológico, turismo e investigación científica.
A modo de desenlace, Joan Martí Molist hizo un llamamiento a la creación de más programas de investigación y una inclusión del estudio de los volcanes en la educación. Su idea es que este hecho ayudaría a promover, no solo que se hiciera una buena vigilancia, sino que se podrían gestionar mejor los recursos, con el objetivo de devenir una sociedad preparada para hacer frente a este hecho geológico, por ejemplo, a través de la planificación del territorio con planes de emergencia.
Podéis recuperar la conferencia en el canal de YouTube.